¿Qué es la energía yin y yang? La teoría del Yin y el Yang nos dice que todo lo que nos rodea se compone de dos fuerzas opuestas que se unifican en armonía para favorecer el movimiento y, a su vez, el cambio
El yin representa el frío, la oscuridad, el agua, lo lento, lo femenino o la luna. Por el contrario, el yang es el calor, la luz, el fuego, lo rápido, lo masculino o el sol. Son muchos los términos que contrapone esta filosofía, todos ellos presentes en nuestro entorno y en nosotros mismos.
Sabemos que como seres humanos estamos compuestos de energía femenina y masculina y no tiene nada que ver con la identidad sexual o con ser hombre o mujer.
Los seres humanos tienen que mantener el equilibrio de estas dos energías, cada una en un 50%, por las diversas situaciones que viven en su día a día las personas desarrollan una energía más que otra.
A lo largo de nuestra vida que vamos creciendo nos intensificando con una energía más que otra, eso tiene mucho que ver con nuestro entorno. Utilizamos muchas veces las dos energías, por eso es importante identificarlas, porque en las relaciones cuando existe una energía más que otra, se da el desequilibrio" (no hay dualidad).
La energía femenina está en mayor contacto con las emociones, mientras que la masculina se identifica con la mente racional.
En el siguiente cuadro podrás ver cuáles son las energías femeninas y masculinas, para hacer saber identificar qué energías estás manifestando o recibiendo.
El yin y el yang son contrarios que colaboran y se apoyan mutuamente, hasta el punto de que uno está siempre incluido en el otro. Mantener la dualidad con ambas energías ayuda a equilibrar nuestro cuerpo y así ayudarlo a que no sufra desequilibrio, causando factores que nos provocan enfermedades como el estrés.
LA ENERGÍA YIN-YANG DEL CUERPO
Al igual que el yin y el yang, la energía en el cuerpo humano se divide también en dos partes o hemisferios:
La parte alta yang desde el plexo solar hacia la cabeza. Es la zona que tiene que estar más fresca pues le llega la energía yang del sol. Es donde se producen las acciones aéreas (respiración, pensar, oler, etc).
La parte baja yin desde el plexo solar hacia los pies. Es la zona de digestión, eliminación, del sistema reproductor. Esta zona tiene que estar caliente ya que le llega más energía yin de la tierra.
Todos tenemos una tendencia a más yin o más yang. Incluso el color de la piel nos da indicaciones de la energía que hemos heredado.
Los alimentos son una de nuestras fuentes principales de energía tanto yin como yang.
Los alimentos del reino vegetal tienen más energía que sube de la tierra (yin) y los alimentos de origen animal, que tienen movimiento están más influenciados por la energía que baja del sol (yang).
En exceso, los alimentos yin van hacia arriba activando demasiado la cabeza (por eso las migrañas, papada y problemas respiratorios). Y por supuesto, los alimentos yang van hacia abajo acumulándose y bloqueando demasiado en los órganos de eliminación (estreñimiento o diarrea, grasa en abdomen y muslos, retención de líquidos, síndrome pre-menstrual, etc.).
Pero la energía yin-yang de los alimentos no sólo afecta a nivel corporal sino también a nivel de forma de pensar y actuar en el dia a dia. Por ello también se diferencia entre personas yin o yang según su condición y personalidad. Veásmolo más detalladamente:
CÓMO SE MUESTRA LA ENERGÍA YANG EN LAS PERSONAS
Su centro energético, su núcleo interno está muy cerrado lo que produce tensión y mucho calor. Tiene vitalidad y energía pero puede que esté bloqueada. Necesita abrirse, expandirse tomando alimentos que le relajen y refresquen como por ejemplo chocolate, café, azúcar, frutas tropicales, alcohol, helados o lácteos.
¿Cómo son físicamente?
CUERPO: Suelen tener formas redondeadas y estatura baja.
PROPORCIÓN CABEZA/CUERPO: Cabeza relativamente grande.
ESTRUCTURA ÓSEA: Pesada, fuerte, con los huesos de los tobillos y muñecas robustos.
CONTORNO DE LA CARA: De forma cuadrada o redonda.
MANDÍBULAS: Cuadradas.
MANOS: Robustas, anchas y más bien secas.
DEDOS: Cortos, sólidos y densos, y muy juntos unos con otros.
PIES: Con durezas y uñas duras y gruesas.
OREJAS: Grandes, con lóbulos pronunciados.
DIENTES: Fuertes y con escasos problemas.
LENGUA: amarilla o roja y de aspecto
o seco.
¿Cómo se comportan las personas con constitución YANG?
Sus reacciones son lentas
Suelen ser personas abiertas y les gusta relacionarse con los demás.
A veces pecan de ser excesivamente amables y son muy educadas.
Si algo le preocupa les encanta hablar de ello con otras personas. Necesitan la aprobación de los demás.
Son bastantes estables emocionalmente, aunque eso no quiere decir que de vez en cuando se alteren.
Son personas comunicativas con los sentimientos.
¿Qué temperamento tienen?
Tendencia a ser más dinámico, social, práctico, competitivo, con actividades que requieren movimiento.
Pero cuando están en desequilibrio pueden estar Irritables, agresivas, muy introvertidas o muy extrovertidas, ideas fijas, controladoras, pueden gritar por nada y no escuchan. Son personas que pueden tener un comportamiento rígido, inflexibles, materialistas, exigentes, críticos, perfeccionistas y que piensan siempre en el pasado.
CÓMO SE MUESTRA LA ENERGÍA YIN EN LAS PERSONAS
El centro energético está muy abierto, la energía se va, se dispersa, se enfría. Necesita cerrar la energía, calentar y centrar. Se llega a esta situación por una alimentación basada en alimentos extremos yin.
¿Cómo son físicamente las personas yin?
Son personas de constitución fina, delgada y más artísticas que lógicas.
CUERPO: Tendencia a ser delgado y alto.
PROPORCIÓN CABEZA/CUERPO: Cuerpo relativamente grande comparado con la cabeza.
ESTRUCTURA ÓSEA: alta, huesos largos, delicados, ligeros y delgados.
CONTORNO CARA: Más bien alargada y delgada.
MANDÍBULAS: Delgadas y puntiagudas.
MANOS: alargadas, más bien húmedas y frías.
DEDOS: Si al cerrar los dedos de la mano vemos espacios entre ellos, es yin.
PIES: Tobillos hinchados o tendón de Aquiles doloroso o de color violáceo.
OREJAS: Pequeñas y lóbulos escasos.
DIENTES: Múltiples problemas dentales, débiles, se carian y rompen fácilmente.
LENGUA: pálida, blanquecina y muy húmeda.
Y, ¿Cómo se comportan las personas con constitución Yin?
Son personas nerviosas, con movimientos rápidos y reaccionan rápido.
Tienen tendencia a cohibir sus sentimientos.
Tratan de controlar conscientemente la expresión de sus emociones.
En momentos de preocupación prefieren la soledad.
Son personas que tienden a tener la mente dispersa, les cuesta concentrarse.
Tienen una actitud difícil de predecir.
Suelen ser tímidos.
¿Qué temperamento tiene?
Tendencia a ser más creativo, mental, artístico, emocional, pasivo, volátil, con actividades de origen intelectual y artístico.
Cuando están en desarmonía energética, pueden comportarse como víctimas de la vida, depresivas, les cuesta concentrarse, dudan de todo, hipersensibles, irritables, falta de control, lloran con frecuencia por cualquier cosa. Son personas que les falta de dirección en su vida, sin ilusión, dispersas, indecisas, nunca terminan de hacer las cosas, no saben lo que quieren.
Todos tenemos características de ambas energías yin-yang pero hay una tendencia más acusada a una u otra. ¿Ya sabes ahora cuál es tu energía?
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Soy Yin o Yang
Como hemos dicho antes, todos tenemos (hombres y mujeres) en nuestro interior dos tipos de energía: la femenina y la masculina. Los taoístas denominan a estas dos energías Yin (femenina) y Yang (masculina) y la simbolizan con el famosísimo diagrama que seguro conoces.
La parte negra es el Yin o energía femenina y la blanca es el Yang o energía masculina. Donde acaba la femenina empieza la masculina y viceversa. La energía Yin o femenina es la energía receptiva, creativa e imaginativa. La energía Yang o masculina es la dinámica, activa, agresiva y la que regula la capacidad de dar. Dentro de la parte negra del diagrama hay un círculo blanco, que quiere decir que en el corazón de la parte femenina existe energía masculina y el círculo negro en la parte masculina recuerda que también allí hay energía femenina. Cada parte necesita de la otra para lograr el equilibrio.
La armonización de estas energías opuestas en nuestro interior, logrando un perfecto equilibrio, es la clave para que muchos de nuestros proyectos obtengan buenos resultados.
Desde nuestra situación como mujeres y hombres, teniendo en cuenta que las dos energías (femenina y masculina) están presentes en nuestro interior, debemos ser conscientes de que por regla general nuestro trabajo tiene que estar más centrado en desarrollar el lado masculino, que tendemos a manifestar en menor grado las mujeres, y que nos va a ayudar a equilibrar las competencias de los dos géneros.
Una mujer valerosa y potente, deliciosamente masculina, con muchos hitos en tu carrera profesional ganados en innumerables batallas a las que te has tenido que enfrentar a mucha testosterona.
Yin y yang se refieren a elementos simbólicos o conceptos que representan fuerzas complementarias en el mundo natural y espiritual dentro el pensamiento chino, particularmente en el taoísmo.
El yin se refiere a la fuerza o energía negativa manifestada en lo oscuro y que es receptiva, como las sombras del lado norte de una montaña. Históricamente asociado a lo femenino, lo pasivo, suave y las épocas frías.
El yan es aquella energía positiva, la claridad y la luz, entendida como creadora y generadora. Esta representa el lado sur iluminado de una montaña. Lo masculino, lo activo, la dureza y las épocas cálidas son atributos del yang.
En el taoísmo, el yin y el yang representan principios que se encuentran en el universo, los cuales no son opuestos, sino que se complementan. En su interacción, crean todo aquello que existe. Su relación se reconoce a través del símbolo del taijitu, conocido popularmente como el "yin yang".
¿Qué es el yin?
El yin es un elemento que, junto al yang, representa un principio del orden del universo y todas las cosas existentes. Su traducción del mandarín significa la ‘fuerza negativa’ y se asocia a lo oscuro. En este sentido, el yin es la energía receptora y pasiva del universo, entendido como la cara norte de una montaña, oculta entre las sombras.
Así, el yin como energía negativa no se entiende como algo "malo", sino como algo complementario a la claridad. Como una sombra que se proyecta sobre un objeto expuesto a un rayo de luz.
Es considerado por muchas personas, junto con el yang, como un principio ordenador del cosmos o un símbolo que representa una energía de ciertos atributos de las cosas. Ambos elementos son expresiones utilizadas para entender la realidad del ser humano. Es decir, tanto yin como yang pueden ser vistos como formas de observar el mundo social y natural.
De la misma forma, los diferentes ciclos y períodos del año están representados por alguno de estos elementos. El yin representa la época que cubre el otoño e invierno, caracterizada por ser más oscura y fría. Durante estas estaciones hay menos labores y actividades al aire libre.
Además, el yin ha sido asociado históricamente a lo femenino, ya que a las mujeres se les asignaba el labores dentro de la casa, el cuido y la alimentación de la familia, y no de las actividades de trabajo en el campo (que eran consideradas más activas y propias de los hombres).
Características del yin
Es femenino.
Es la serenidad.
Sus estaciones: otoño e invierno.
Es frío.
Su momento es la noche.
Es oscuro.
Se asocia al norte.
Es suave.
Su movimiento es la contracción.
Se manifiesta en el agua.
Es pasivo.
¿Qué es el yang?
El yang es un elemento que se traduce del mandarín como ‘fuerza positiva’, representando aquello que tiene luz o está iluminado. Su significado se ejemplariza como la cara sur de una montaña que refleja la luz del sol. La cualidad del yang es la energía generadora y activa.
Como complemento, el yang representa lo opuesto al yin, pero no como si en un sentido de oposición, sino como dos caras de una misma moneda. De esta forma, el yang simboliza lo masculino, lo cálido, lo duro, la luz y el fuego.
El yang representa la época de la primavera y el verano. Durante las épocas cálidas y con más luz, como acontece durante estas estaciones, el trabajo en el campo era (y es) una actividad común.
Así, como resultado de la observación del mundo social y natural, el yang estaba inscrito en las labores del día a día realizadas al aire libre, desprendiéndose de este la idea de movimiento o acción. Estas tareas se han asociado históricamente al hombre, además de la de ser quien trae el alimento de fuera de la casa.
Características del yang
Es masculino.
Es la fortaleza.
Sus estaciones: primavera y verano.
Es cálido.
Su momento es el día.
Es claro.
Se asocia al sur.
Es duro.
Su movimiento es la expansión.
Se manifiesta en el fuego.
Es activo.
Relación entre el yin y el yang
Estos elementos son considerados como partes de un todo. Ambos, el yin y el yang, se necesitan mutuamente y su coexistencia permite que el universo exista. Su relación es la de un movimiento continuo de acción-reacción. Ninguno de los dos tiene más valor o superioridad que el otro, ya que son partes integrantes y necesarias de la realidad social y natural.
Dentro del taoísmo y el pensamiento clásico chino, la armonía entre ambos es como la realidad cíclica natural. Por ejemplo, siguiendo el ciclo diario, durante el día se realizan las labores en el campo, momento que manifiesta el yang. Por la noche y cuando hace frío, las personas descansan dentro de sus casas, y esto representa al yin.
Es por esto que el yin es aquello pasivo, ya que durante la noche hay poca actividad, y el yang es visto como lo activo. Esta unión asegura el balance del universo.
Se podría decir que el yin y el yang manifiestan su sentido precisamente por ser complementarios. Esta dinámica se manifiesta a través del qí (chí) que es la 'fuerza vital' que fluye en el universo.
El yin y el yang en el taoísmo
El taoísmo es una tradición de pensamiento china con unos 2500 años de antigüedad aproximadamente. En el taoísmo se le da una gran importancia a la armonía natural del universo, la cual se consigue con la conjunción del yin y el yang.
Dentro de esta tradición, el Tao es un elemento que da orden al universo y todas las cosas, permitiendo dicha armonía. El Tao es interpretado (y traducido) de diversas maneras, siendo particularmente conocido como ‘la vía’ o ‘el camino’.
El taoísmo, como expresión del Tao, es visto como una forma apropiada de vivir. En este caso, el Tao o la vía es el camino correcto durante la existencia. El Tao no trata de conceptualizar la vida, sino que es más bien una forma de ser cuando se vive.
Dentro de la tradición taoísta, la naturaleza y sus ciclos deben ser respetados, por lo que seguir al Tao permite que cada ser actué conforme a la armonía creadora del universo. Asimismo, el Tao se encuentra presente en todas las cosas, y los humanos son una expresión de este.
En el Tao Te Ching o El libro del Tao y su virtud, que es un texto atribuido a Lao Tzu (alrededor de los siglos IV a VI a. C), se sentan las bases del taoísmo. Este libro se centra en el Tao y su relación con las energías complementarias yin y yang, sin definir ninguna, aunque señalando su importancia dentro del flujo vital del universo y su armonía.
En el capítulo 42, el Tao Te Ching hace referencia explícita a la relación que tiene el yin y el yang con el Tao:
El Tao dio a luz al Uno. El Uno dio luz al Dos. El Dos dio luz al Tres. El Tres dio luz a toda la creación. Todas las cosas llevan consigo la fuerza negativa del Yin, A la vez que abrazan la fuerza positiva del Yang. La unión de estas fuerzas, Les permite alcanzar un estado de armonía.
De esta forma, en el taoísmo el yin y el yang se encuentran presentes en todas las cosas y criaturas. No son separables, y sin embargo son distintos. Esta armonía indica que existe una vía (Tao) que es seguida naturalmente en el universo.
Dentro del taoísmo, la vida se lleva sin bloquear la vía de las cosas. Esto significa que aquello que "es" no debe ser obstruido. Cada acción que vaya en contra del Tao puede afectar el curso natural que las cosas siguen.
La idea es, entonces, actuar de acuerdo al Tao, libre de egoísmos. Es decir, a través del Wu Wei, o el ‘hacer sin hacer’, es como se puede las personas pueden actuar sin obstruir al Tao, libres de cualquier manifestación de egocentrismo.
Para visualizar esto, se puede pensar en un gran río fluyendo hacia el mar. Si se fuera a cruzar nadando, ir en contra de la corriente, que es el flujo natural de las cosas (Tao), habría un gasto muy grande de energía, además de posibles consecuencias mortales. En cambio, si se sigue el flujo del río, la acción de cruzar poco a poco nadando a favor de la corriente permite que se emplee menos energía. Esto conlleva el dejar que el río "sea" y el actuar sin hacer (Wu wei), preservando la armonía natural.
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